Los pelos enquistados o pseudofoliculitis son un problema frecuente de todas esas zonas corporales en las que eliminamos el vello corporal, tanto en hombres como en mujeres. Los pelos enquistados aparecen cuando el pelo no sale por el canal que debe salir y se entierra en la piel. A veces el pelo se ve claramente por debajo de la piel y es fácil eliminarlo, pero muchas veces está más profundo y cuesta que salga; incluso puede evolucionar mal y favorecer la aparición de cicatrices o hiperpigmentación.
La pregunta es ¿puede evitarse que esto suceda? Y si no puede evitarse ¿pueden minimizarse las consecuencias? Lo analizamos todo en este artículo.
¿Qué son los pelos enquistados?
Un pelo enquistado es un pelo que crece por debajo de la piel, normalmente después de haber sido afeitado, arrancado con cera o con pinzas. Aparecen cuatro-cinco días después de una depilación, incluso más, y pueden durar días o semanas en algunos casos. Después de la depilación el vello crece, pero a veces no sale por el conducto piloso (que es por donde debe salir) y, en cambio, crece por debajo de la superficie de la piel que rodea la raíz capilar. La piel reconoce que hay un cuerpo extraño en su interior (aunque el pelo sea algo propio, no es propio de todos los sitios, sino que solo pertenece al conducto piloso) y el sistema inmune “ataca”.
Un pelo enquistado puede tener diferentes aspectos, sobre todo dependiendo del tipo de pelo y de piel:
- Puede verse muy superficial, bien por debajo de la piel, generando apenas una irregularidad en la piel.
- Puede que aparezca una zona inflamada, roja y dolorosa, con algo de aumento de volumen, y donde debería haber un pelo saliendo solo se ve una “vueltita” de pelo que nos indica que hay allí un pelo encarnado.
- Puede que el pelo esté muy profundo y no se vea, pero que sí se sienta el volumen, el dolor y el cambio de color (rojo en pieles claras, marrón en pieles oscuras).
- Puede haber picor en la zona del pelo enquistado, sin tanta inflamación, pero con molestias.
En algunos casos menos afortunados, particularmente al “toquetear” el pelo con instrumentos no estériles o con las manos sucias, puede quedar una cicatriz o una mancha de hiperpigmentación como “recuerdo”. También puede pasar que los quistes se infecten, es decir, algunas bacterias entran en la piel donde está el pelo enterrado, aparece pus como consecuencia de la actividad defensiva, y la persona cree que tiene acné. Pero en realidad hablamos de quistes sobreinfectados y la prevención y solución es un poco diferente a la del acné, aunque a primera vista sea fácil confundirse.
¿Por qué se enquistan los pelos?
Varios factores influyen en el desarrollo de un pelo enquistado:
- Obstrucción de los poros. Los vellos corporales deben salir por el conducto piloso, pero la piel muerta y el sebo pueden obstruir el poro y bloquear la salida del vello que crece.
- Tipo de cabello. El cabello rizado tiende naturalmente a doblarse, por lo que es más fácil que “pierda su dirección” y crezca hacia los laterales en vez de crecer recto. Las zonas con cabello más grueso (axilas, zona de bikini, barba) se enquistan con más facilidad que las zonas con cabello delicado (piernas, brazos) debido a la mayor resistencia del cabello, que le da la fuerza para penetrar la piel.
- Método de depilación. El afeitado favorece que se genere un extremo “en punta” que perfora la piel superficial con más facilidad que un extremo natural. En cambio, los métodos que arrancan cabello (pinzas, cera, etc.) pueden arrancar el cabello mal, dejando un fragmento de cabello en el conducto que no puede salir y continúa su camino perforando el costado del conducto piloso.
- Factores genéticos. Investigaciones recientes indican que algunas variaciones en la secuencia de aminoácidos de la queratina (la proteína que constituye el cabello) favorecen que los cabellos se enquisten.
Evitar el pelo enquistado implica hacer cambios en los métodos de depilación y en el cuidado de la piel.
¿Cómo evitar los pelos enquistados?
La forma más fácil es no depilarse. Puede que socialmente no sea aceptable en algunos círculos, pero realmente es una de las mejores maneras de evitar que se enquisten los cabellos. En el caso del afeitado del rostro de los chicos, afeitar dejando pocos milímetros de barba puede ser una buena opción. Pero si estas soluciones no te sirven y optas por una depilación al ras, las estrategias pasan por:
- favorecer la salida adecuada del cabello por el poro del conducto piloso.
- evitar que este poro se obstruya con células y sebo.
Veamos cómo…
¿Cómo depilarse minimizando las posibilidades de los pelos enquistados?
Hay varias maneras, cada una con diferente nivel de efectividad.
- Depilarse con láser. Esto en realidad no es minimizar, sino eliminar el problema. La depilación permanente destruye para siempre la raíz del vello e impide que haya vello nuevo, con lo que “adiós para siempre” a los pelos enquistados.
- Depilarse con cremas depilatorias. Las cremas depilatorias generan un extremo capilar debilitado, con lo que el pelo no tiene fuerza para perforar la piel y se enquista menos que los pelos que se depilan con cuchilla o cera.
Cada una de estas opciones tiene un diferente nivel de éxito y coste económico. Además, no todos los métodos son aceptables para todas las zonas corporales o todos los tipos de cabello y piel; las pieles más oscuras no pueden beneficiarse del láser, mientras que las zonas de piel delicada no pueden exponerse a la agresividad de algunas cremas. Si ninguna de estas opciones es viable, lo “menos malo” es depilarse con cuchilla o cera teniendo ciertos cuidados:
- Afeitar en la piel húmeda sin estirar la piel. ¿Por qué? Porque la humedad genera cambios que hacen que la punta del cabello sea menos filosa. Y porque el estiramiento genera un “latigazo de retorno” que facilita que la punta del pelo se retraiga y quede un pelo “más profundo”, facilitando la perforación de la piel. Por eso, recomendamos usar agua tibia para ayudar a suavizar el vello y la piel.
- Pasar cera en la piel seca y sin cremas. Esto hace que la cera se pegue mejor a los folículos pilosos, arrancando el pelo desde la raíz. Además, elimina las células muertas de la piel, actuando como exfoliante físico. Ten en cuenta también que para prevenir los pelos enquistados tienes que depilarte siguiendo la dirección del crecimiento del vello.
¿Cómo tratar la piel para que no se obstruyan los poros?
Básicamente intentaremos:
- Controlar la secreción sebácea. Menos grasa, menos conductos pilosos obstruidos. Moléculas con zinc o algunos extractos naturales (bardana, ciprés) ayudan a este fin.
- Exfoliar la piel, tanto con exfoliantes físicos como con exfoliantes químicos. Al exfoliar eliminamos células que podrían obstruir el conducto piloso y facilitamos la salida del cabello por el sitio correcto. Ácido glicólico, salicílico o mandélico son exfoliantes químicos aptos para este uso.
- Facilitar la correcta renovación de la piel. Aquí es donde brillan los retinoides, tanto los de venta libre como los de prescripción médica. Además, facilitan la eliminación de cicatrices que puedan quedar de quistes anteriores.
- Controlar el crecimiento bacteriano, sobre todo en los casos que derivan en infecciones foliculares. El peróxido de benzoilo es un antibacteriano de venta libre potente, muy útil para estos casos.
Estas moléculas pueden crear productos muy fuertes dependiendo de su concentración y de los demás activos de la fórmula, por lo que es conveniente que hables en tu farmacia de confianza para crear una rutina de belleza que minimice los pelos enquistados y al mismo tiempo se adapte a tu tipo de piel y a la zona que necesites tratar.
¿Cómo tratar los pelos que ya se han enquistado?
Si ya tienes pelos enquistados, es importante evitar hurgarlos o manipularlos, ya que esto puede irritar la piel, causar infecciones y cicatrices.
Para empezar, evita hurgar, cortar o manipular el pelo de forma que la piel se rompa y se lastime. Esto favorece la formación de infecciones y de cicatrices.
Si el pelo estuviera muy, pero muy visible y muy superficial puedes intentar “pescarlo” con una aguja estéril (como las de jeringas, por ejemplo). Ojo: esto lo recomendamos solo si el pelo está “a un arañazo” de ser extraído. Y siempre limpia bien tus manos y la piel antes de intentarlo, para evitar infecciones.
Pero si el pelo estuviera más profundo no recomendamos que intentes extraerlo, por varias razones:
- Puedes causar dolor y sangrado importante manipulando zonas menos superficiales de la piel.
- Puedes infectar la piel, debido a que la manipulación facilita que las bacterias de la superficie lleguen a zonas más profundas. Generas así más molestias de las que ya tenías y la necesidad de tratar con antibióticos.
- Puedes crear una cicatriz, pues la piel lastimada, cortada y hurgada no siempre cierra bien.
Si tienes pelos muy enquistados es mejor comenzar un tratamiento con productos que calmen los síntomas (por ejemplo, niacinamida o hidrocortisona) y que faciliten que el pelo salga a la superficie (exfoliantes).
Pero si tienes cicatrices, mucho dolor o zona de infección es mejor hablar con un dermatólogo: cuanto antes trates las lesiones, más fácilmente tratarás el problema y antes se irán las marcas y las cicatrices. Y frente a cualquier duda puedes recurrir a tu farmacia de confianza: allí sabrán ayudarte recomendando una rutina adecuada para tus necesidades o derivando al médico si tu piel lo necesita.
Lorena Crosa es licenciada en Química y Farmacia en la Universidad de la República (2000 – 2004). Se ha formado como profesora técnica de Química en el Instituto Normal de Educación Técnica (2004-2005). Cuenta con estudios de postgrado en Ciencias en la Universidad Camilo José Cela (2009) y posteriormente ha realizado un segundo grado de carrera de Farmacia en la Universidad de Barcelona (2010 – 2013).
Su experiencia laboral se ha centrado en el campo de la ciencia, dentro de hospitales como científica de laboratorios clínicos (2005 – 2007), así como docente de educación química en distintas universidades como el CEPRODIH y la Universidad de la República.
Tras licenciarse en su segunda carrera de Farmacia, centró su experiencia en las oficinas de farmacia, además de trabajar como consultora técnica en empresas de la industria farmacéutica.
En Farmacias Ecoceutics, Lorena Crosa ha sido un miembro activo y de gran valor desde 2018 hasta la actualidad, siendo la responsable de contenidos de la empresa haciendo uso de su expertise.