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Ya no se discute que tenemos que proteger nuestra piel de la acción nociva de los rayos ultravioleta (UV). Sabemos que además de quemaduras, los rayos UV están involucrados en procesos de cáncer de piel. Pero investigaciones recientes han demostrado que no son los únicos rayos que pueden alterar nuestra piel; te presentamos hoy a la luz azul, y te contamos qué efectos pueden tener sus rayos en nuestra piel.
La luz azul es la que se emite dentro del rango de luz visible entre los 450-495 nm. Durante mucho
tiempo la fuente principal de luz azul fue la luz solar, pero a medida que aparecieron pantallas e iluminación basadas en la tecnología LED se han sumado fuentes de emisión de luz azul, y con ellas han subido las horas de exposición.
La luz azul es capaz de producir eritema en individuos de fototipo I-III (pieles más claras, que se queman con más facilidad y pueden llegar a broncearse) y pigmentación no deseada en los fototipos IV-VI (manchas en pieles más oscuras, que se broncean con facilidad y a veces o nunca se queman). También se ha visto que la luz azul es capaz de inducir estrés oxidativo en la piel, con lo que podría estar relacionada con el fotoenvejecimiento.
La luz azul podría explicar los casos de empeoramiento de melasma y pigmentación post-inflamatoria que aparecen aún cuando se ha utilizado protector solar regularmente, ya que los protectores solares han comenzado a utilizar filtros anti luz visible (los ves como HEVL en los envases) solo muy recientemente.
Muchos estudios científicos han mostrado que la luz led puede tener un efecto sobre la piel, pero las condiciones y los tiempos no siempre igualan las condiciones de uso en la vida real, por lo que las conclusiones no aplican directamente a nuestro día a día. Pero si ves que tienes manchas sobre todo en el lado de la cara que utilizas el móvil, o si durante el invierno te empeora el melasma, o incluso si ves que la pigmentación de la cara te ha cambiado durante el confinamiento, es posible que la exposición a luz azul te esté afectando.
Puedes controlar la exposición a la luz azul de alguna de las siguientes maneras: